viernes, 28 de mayo de 2021

Casos Verídicos: Mi Abuela – Mi Maestra 🎓

  En realidad, otra de mis muuuuchos Maestros en esto que llamo el Arte de Vivir. 

De seguro que muchos ya me habéis escuchado/leído, acerca de mi Abuela de Adopción, Manoli. Ella vive en una aldea de Extremadura, apenas poco más de 2000 habitantes. Muy cercana a una ciudad más grande, unos 60xxx habitantes. 

Manoli, al igual que todo-todo-todo el mundo, para mi, está resultando una magnífica Maestra de la Vida. 👩‍🏫

Cuando digo que todo-todo-todo el mundo es mi Maestro, no es una coña, no es broma. Así lo experimento. Porque cada persona me mostráis algo. Algo que “me gusta” a veces, y algo que “me gusta menos” otras veces. Mejor dicho: le gusta más o menos a mi lorito/mente. 🐦En todas las ocasiones, me veo reflejada. Me paro – miro – reflexiono – me dejo sentir – re-conozco. Siempre me digo “¿Qué me está mostrando esta persona?” 🤔💗

Me resulta curioso. Al parecer los humonitos/terrícolas somos así. En el otro “vemos” con más facilidad, lo que no soy capaz de ver en mi mismo. 👀 Supongo que forma parte de esta experiencia 3D que llamamos dualidad. No-pasa-nada.

La Vida tiene muchas y muchas formas de ponernos delante, de mostrarnos a los Maestros. Está claro que “Cuando el discípulo está preparado, aparece el Maestro”, y también que “Todos Somos discípulos y Todos Somos Maestros”. Por muy pequeño que me crea, y eso es una falsa humildad, también nosotros estamos mostrando, estamos enseñando/recordando algo, a otra persona. 

En este caso, en este momento, es Manoli la que me muestra y me recuerda “Como a ti mismo”. 🌀

Esta criatura tiene sólo apenas unos pocos años más que yo. Da igual. Ha tenido una vida de lo que podríamos calificar de bastante machacada a nivel terrícola. Trabajando desde muy pequeña en el campo, sin apenas ir al colegio. Una vida dura. Lo que llaman Violencia de género en su matrimonio con el padre de sus 2 hijos. Su cuerpo, obviamente, lo manifiesta con mogollón de des-ajustes en su cuerpito: varias hernias de diferentes tipos, trombrosis, ictus, ojos, articulaciones, circulación, caderas … Algo así como el rosario de la aurora en des-ajustes físicos. Y por eso, está acogida a la llamada “Ley de dependencia”. Tiene una chica que va a su casa, a SUPUESTAMENTE echarle una mano en las tareas domésticas. 🧼

Siempre repito lo de “supuestamente”, pues en este caso, esta criatura que va a casa de Manoli, no le hace lo que ella necesita. Además es muy gritona, y discute por todo. Manoli me cuenta que ella termina haciendo cosas que J debería haber hecho, y no las hace. Manoli calla, “porque no quiero pelea”. 

Manoli sabe muy bien lo que quiere, solo que, desde mi perspectiva, que no juicio -¡Dios me libre!- se queda en el “buenismo”. “No porque es que L (la dueña de la empresa de servicio a domicilio) la va a tener que echar, y pagarle una indemnización” me dice mi Abuela. Yo le digo que noooooooooooooo, que si los usuarios no están contentos con ella, ningún tribunal de trabajo va a obligar a L a pagarle ninguna indemnización, por un trabajo que no ha realizado en las condiciones óptimas y deseables. Como se supone que debiera hacer. 

Hace 1 año ya que conozco a Manoli. Que empecé a llamarla por teléfono, a contactar con ella por güasa y feisbuuk. Y hace un año que la escucho lo mismo: Quejarse – quejarse y quejarse de J, la chica que va a su casa. Yo le digo que no hable tanto, y que ACTÚE. Ella me cuenta -hace unos meses- que ha hablado con la jefa y le van a dar otra oportunidad, que está más suave.

Excusas y más excusas. Es bueno ser TOLERANTE, FLEXIBLE, hay que ser de todo, sólo que ¿HASTA CUANDO? La Paz-ciencia, como bien dice el refrán “tiene un límite”

Manoli coge unos berrinches que no le benefician en nada, a mi modesto sentir. Se me ocurre que la última trombosis que tuvo hace poco, estuvo ocasionada por tantos y tantos berrinches en los últimos meses. El cuerpo nunca miente. Y TODOS los des-ajustes físicos, vienen de cuestiones mentales y emocionales que no manejamos de la mejor forma para nuestra Vida. Bueno, nuestro personaje. 

Adonde voy: Manoli está siendo una magnífica Maestra de la Vida. Le doy GRACIAS – GRACIAS – GRACIAS, por re-cordarme tantas y tantas cuestiones. 🙏🙏🙏

Al parecer, sólo al parecer, en esta experiencia terrícola, necesitamos que nos recuerden de vez en cuando. Y como la Vida, el Uni-verso … como quieras llamarlo, lo sabe, te va poniendo los Maestros-Recordatorios por delante: sí y también. Cada vez que se tercie. Si yo no sé re-conocerlo … es mi historia personal. 

GRACIAS – GRACIAS – GRACIAS Abuela. 💞Aunque sea una abuela de adopción, y no nos conozcamos personalmente, hay una conexión muy bonita. Cuando ella me cuenta sus cosas, a mi me duele. El pellizco lo siento, sólo que después lo suelto, porque me recuerdo a mi misma que ESA ES SU HISTORIA, y que es ella la que debe decidir, que no es ninguna niña chica. 

“Si no miras tú por ti misma ¿quien coño va a mirar por ti?” Le recuerdo cuando surge el tema. “Si tu no respetas tu espacio ¿quien puñetas lo va a hacer?” La sinceridad es la base de nuestra relación.

Otra historia de Manoli, es que tiene una especie de inquilino, por no estar sola. La puedo entender, desde la parte terrícola, de que ella mira su edad, sus achaques, y no quiere estar sola, por miedo. Puedo entender sus miedos, aunque no los comparta Para mi la sol-edad nunca ha sido un handicap para hacer/dejar de hacer nada, ni para estar con nadie. Solo que, le recuerdo “Si ese miedo por estar sola, te merece la Alegría de los sofocones que te da Antonio: te da voces, a veces te trata como una algofifa, no contribuye a los gastos de la casa, cuando él come todos los días, su ropa se lava en la lavadora, gasta luz, tiene la tele puesta tooooodo el día … Él está en una pensión, sin pagar un duro." Y ella tiene una pensión mínima, que no llega a los 500 euritos. Porque su relación no va más allá de la supuesta necesidad de ella de tener alguien cercano “por si ocurre algo”.  Lo único -todo hay que decirlo- es que él pone su coche a su disposición, cuando ella necesita ir a la ciudad cercana, o algún lugar que necesita coche para ir. 

Cada vez que Manoli me cuenta algunas de sus movidas, yo me cojo un buen berrinche. Mi lorito se pone en marcha: “Ay que ver, que se están aprovechando de una mujer indefensa y enferma … … ...” Hasta que mi YO le dice (a mi lorito): “¡Déjate de pajas mentales, que ella está experimentando lo que ella ha elegido! Si no tiene los ovarios de decirle “Antonio, coge la puerta y vete” porque no quiere estar sola y prefiere pasar por-lo-que-sea: esa es SU historia personal, por mucho por saco que me de. Y con J, la chica de asistencia en domicilio, tres cuartos de lo mismo.

Pues eso: está siendo una magnífica Maestra de RESPETAR que cada uno tiene su proceso, tiene sus miedos, por los que está dispuesto a aguantar carros y carretas; cada uno es res-ponsable de sus decisiones. Que yo no le voy a “arreglar” la vida a nadie ¡Dios me libre! Y que TODO ES PERFECTO Y CORRECTO, aunque haya quien todavía no se lo crea, no se lo tome muy en serio, o lo cuestione. 

Mi experiencia del día a día me repite lo mismo: TODO ES PERFECTO Y CORRECTO. Las decisiones que cada uno tome, más allá de que a mi me parezcan un disparate morrocotudo, son las perfectas y correctas, al igual que las que yo tomo, que también le pueden parecer disparates morrocotudos a quien-sea. Les pueden parecer una boutade, también son las perfectas y correctas, porque lo son para mi. 

         Ella no para de agradecerme “Porque me das mucha fuerza”. Eres la nieta de verdad que no tengo en mi familia". De verdad: no lo hago para que me lo agradezca. Y me alegro si le sirvo de recordatorio para esa fuerza que yo sé que tiene. Y mucha. Sólo necesita re-cordarla. 

Antes de publicar la entrada, ocurre un pequeño rifi-rafe -quiero creer que con todo el cariño del mundo mundial- en uno de los grupos de güasa en los que estoy. Un grupo de lo más amoroso, en su mayor parte.      

También GRACIAS – GRACIAS – GRACIAS a las compis que andan con sus dimes y diretes. Hace un tiempito, yo también era igual. Parecía como si tuviera que decir la última palabra. Tuve un magnífico Maestro en J, un vasco más híper-activo (reconocido por él mismo) que yo, y que me enseñó a dejarme sentir: “Ni una contestación más. No me merece la Alegría desgastarme de esta manera”. 

Todas estas historias me recuerdan La Sala de los Espejos de las Tradiciones Maya que habla Emilio y otros autores, porque realmente es así. EL OTRO ES MI ESPEJO. Ya me di cuenta hace tiempo. Como TODOS SOMOS UNO, EL OTRO SIEMPRE ES MI ESPEJO. ¡Qué bueno! 👥😍






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