La Estrella en el Tarot Evolutivo. Ángel León Caballero

La estrella (primera parte).

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Vamos a hacer un ejercicio de visualización utilizando el diseño del arcano La Estrella. Este ejercicio te ayudará a calmar tus ritmos cardíaco y respiratorio, a tranquilizar el vaivén de la volatinera mente y a profundizar en el dominio de la actitud meditativa en tu vida cotidiana. No tienes que hacer nada, simplemente respira conmigo y déjate llevar.

Primer paso: construcción del arcano.

En primer lugar busca un sitio en el que te encuentres a gusto y en el que nadie te moleste durante estos minutos. Recuerda los requisitos para propiciar el buen desarrollo de los ejercicios de meditación: ropa cómoda, temperatura adecuada de la habitación o del ambiente en el que te encuentres, espalda recta y cabeza alineada, tanto si meditas en posición sentada como recostada.

Respira… respira… Empieza realizando respiraciones lentas, profundas, suaves, completas… A medida que profundizas en tu concentración en la respiración tus ritmos cardíaco y respiratorio irán, poco a poco, ralentizándose… Déjate… déjate llevar por las sensaciones que estás experimentando…

Muy bien… tus biorritmos se están ajustando y reequilibrando… Es el momento de iniciar la visualización… A medida que construyes el arcano en tu pantalla mental, visualízalo todo como una escena real en la que te estás integrando. El diseño del arcano tiene una estructura triangular, con cada elemento ocupando uno de los vértices.

Estupendo… En primer lugar centra tu atención en el vértice inferior derecho de la escena… Visualiza un gran árbol, un roble antiguo… Bajando hacia sus ramas, un águila blanca se posa suavemente en ellas…

El águila simboliza la mente que se tranquiliza. El roble representa tu historia personal. Hunde sus raíces en tu pasado, se desarrolla en tu vida presente y, al igual que sus ramas, abre ante ti todo un abanico de alternativas y posibilidades.

A continuación dirige tu atención hacia el vértice inferior izquierdo… Una mujer bellísima, desnuda en toda su integridad tiene dos cántaros que vierten agua… El cántaro que sujeta con su brazo derecho vierte el agua sobre una fuente, y el que sujeta con el brazo izquierdo lo hace sobre un pozo…

La mujer simboliza la realidad tal y como es, no como se imagina, por eso aparece desnuda… El agua representa el fluir de la vida en sus dos aspectos básicos: lo que se ve y lo que queda oculto para nuestros sentidos ordinarios.

Muy bien… ahora dirige tu atención hacia el vértice superior… Una estrella, la estrella polar, destaca sobre el firmamento infinito, iluminando la escena…

Esta luz, la luz de la consciencia, ilumina tu capacidad de percepción y te muestra el camino.

Segundo paso: integración de la simbología.

Perfecto… a continuación vamos a integrar el arcano para fijar su simbología en el subconsciente… Respira… respira…

Sitúate “detrás de tus ojos”… Detrás de ti, oculta a tu mirada están todas tus memorias, todos tus recuerdos y todos tus patrones emocionales y de conducta. No los ves porque están grabados en tu nivel subconsciente. Al igual que el águila del arcano, al respirar y concentrar tu atención impides que tus automatismos se activen y obligas a tu mente a posarse y tranquilizarse.

Al fijar y detener la actividad mental te colocas en posición de observar la realidad tal y como es, sin la intermediación de la mente. Puedes, entonces, ver las cosas tal y como son, libre de las molestas interferencias que interpone el ego.

Por último, al final de todo este proceso, la luz de la estrella, la luz de la consciencia, abre tu percepción y, a través de la vía intuitiva, te proporcionará una valiosa información… nuevos caminos, nuevas posibilidades más convenientes y evolucionadas.

Tercer paso: profundizar en el arcano.

Esperanza… Esperanza… Cada vez que sientas que desfalleces, que no puedes , que te crispas, que no tienes fuerzas para afrontar los retos de la vida… retoma esta visualización.

Nunca… nunca te sientas sólo ni desamparado… nunca te sientas sola ni desamparada… porque la fuerza que guía a las estrellas… es la misma que a ti también te guía.

Besos y abrazos.

La estrella (segunda parte).

Me gusta mucho el diseño de este arcano. Su estructura en triángulo aparece en la mayoría de las tradiciones espirituales: Padre, Espíritu Santo e Hijo en el cristianismo; Shiva, Brahma y Visnú en el hinduismo; Isis, Osiris y Horus en la religión egipcia; etc. Este diseño evoca, inevitablemente, la conocida imagen del triángulo con el ojo en el centro de nuestra tradición occidental.

Pero hilemos un poco más fino… La Estrella contiene los elementos básicos que en el esoterismo se definen como los factores fundamentales en todo proceso de creación o de gestación: la mente en el interior, la realidad en la que vivimos en el exterior, la consciencia en el nivel superior y el observador que presencia todo lo que acontece y que, más o menos conscientemente, activa todo el proceso.

La visualización de este arcano te ayudará en tu senda espiritual. Al instalarte en su contemplación, poco a poco te resultará más fácil desvincularte de la automaticidad de los patrones subconscientes. Esto te permitirá ir superando los aspectos más inconvenientes de tu personalidad y sustituirlos por otros más convenientes y evolucionados.

En este diseño el roble antiguo posee, además, otro simbolismo. Representa el eje formado por nuestro sistema nervioso: La copa sería el encéfalo, el tronco la médula espinal y las raíces los nervios.

Si lo observamos con un poco más de atención veremos que se parece mucho al diseño de una antena…y así es… Nuestro sistema nervioso se comporta en este contexto como una antena… una antena que nos conecta con otra forma de acceder a la información y al conocimiento: la intuición.

En efecto, cuando nos sumergimos en los ejercicios de meditación y ralentizamos la actividad mental abrimos el canal de la intuición. Poco a poco, con el dominio de la técnica activamos una voz… la voz del maestro interior… No, no es que te vayas a volver esquizofrénico y de pronto empieces a escuchar voces. La voz que oirás será tu propia voz, sí, pero esta vez te hablará de forma diferente. Chispas de intuición, ráfagas de conocimiento acudirán a tu mente. No sabrás explicarlo adecuadamente… pero una certeza desacostumbrada se instalará en tu corazón y sabrás… lo sabrás… que no son imaginaciones tuyas.

Obteniendo respuestas.

Si, por ejemplo, estás afrontando una situación especialmente complicada y necesitas ayuda, o bien estás buscando orientación sobre cualquier asunto de tu vida, la visualización que te propongo te puede resultar de gran utilidad.

Como siempre empieza por verificar los requisitos para los ejercicios de meditación… Una vez que estés en la posición adecuada visualiza la escena del arcano y proyéctate en su interior…

Perfecto… ahora visualiza que la bellísima mujer, al verte deja los cántaros en el suelo, recoge del pozo una pluma de ave y un pergamino y se dirige hacia ti. Antes de entregarte estos objetos se vuelve hacia la estrella y alza la pluma en su dirección. Ante su gesto la estrella se activa y parece irradiar su luz con mayor intensidad. Un rayo de luz sale de la estrella y carga la pluma con tinta dorada.

A continuación, con una sonrisa la mujer te entrega la pluma y el pergamino… Muy bien, tómate tu tiempo y escribe tu demanda en el pergamino. Visualiza cómo las palabras se escriben con la tinta dorada.

Una vez que hayas terminado devuélvele a la mujer la pluma y el pergamino. Visualiza cómo ella retorna a su posición en la escena, coloca la pluma y el pergamino en el pozo y recoge los cántaros del suelo.

Muy bien… poco a poco… sin prisas… sal de la escena y sal de la meditación… Y ahora relájate… relájate y permite que el universo trabaje para ti. Evita las expectativas… no estés en el “a ver si…”, pues interferirás en el proceso.

La ayuda o la información que necesitas te llegarán de la forma más insospechada: estás en una sala de espera y, de improviso, en una revista encuentras una pista que te conduce a la solución que buscas; alguien te hace un comentario que te inspira; etc.

Besos y abrazos.

La estrella (tercera parte).

Muy bien, vamos a profundizar un poco más en nuestro diseño en triángulo pero, sobre todo, desde un punto de vista práctico, que podamos usar en nuestra vida cotidiana.

El diseño del arcano contiene los elementos básicos mediante los cuales nos relacionamos con las circunstancias en las que se desarrolla nuestro devenir cotidiano.

Nuestros sentidos constituyen el puente que interconecta la mente, en nuestro interior, con lo que acontece en el exterior. La mente recibe la información del exterior y la compara con lo ya conocido y aprendido, graba o corrige los contenidos de la memoria y activa los procesos de respuesta.

El problema es que todo esto ocurre en milésimas de segundo. Antes, incluso, de que sepamos lo que sucede ya estamos en marcha, reaccionando con todo el abanico de pensamientos y emociones. Vivimos, si es que se puede decir así, atrapados en un ciclo de estímulos y respuestas, presos de nuestros automatismos, en un continuo piloto automático.

Así es, a menos que aprendamos o, más bien, reaprendamos a ser lúcidos y conscientes, estaremos condenados a repetir, una y otra vez, los mismos errores.

En su estado actual de evolución, la mente de este homo-sapiens en el que habitamos “deforma” la percepción de la realidad. Imagina que colocas una bola de cristal en una mesa y depositas en frente a ella cualquier objeto, un bolígrafo, por ejemplo. Ahora contempla el reflejo del bolígrafo en la bola de cristal. Verás el bolígrafo, sí, pero no lo verás en su dimensión real, sino deformado por la superficie del cristal. Así actúa la mente, al comparar lo que percibe con lo que ya conoce. El observador se hará una idea del bolígrafo, pero lo que verá será la imagen reflejada, no la dimensión real del objeto que contempla, y, además, creerá a pies juntillas, dará por válido que este reflejo se ajusta a lo real.

Estamos tan habituados… tan habituados a funcionar así que perdemos el norte. Nos acomodamos, nos autojustificamos… “Pero es que yo soy así”, “pero es que yo… ya con la edad que tengo…”. Es como cuando nos preparamos un café. Imagina que tienes ante ti la taza con el café calentito y humeando. Tomas el bote de leche condensada y viertes un chorrito en el centro del café y empiezas a remover con la cucharilla… Si mientras te preparabas el café has estado, por ejemplo, viendo la televisión, todo esto lo habrás hecho en piloto automático, sin reparar en los detalles. Cuando empieces a tomarte el café éste y la leche estarán tan mezclados que no sabrás distinguir las fronteras que los delimitan. Es más, puede, incluso, que estés tan pendiente a lo que ocurre en el programa de Tele5, que cuando te des cuenta ya te lo habrás tomado y lo único que recuerdes será su sabor… y ni siquiera eso si, además, cogiste unas pastas para acompañarlo.

Muy bien… la práctica regular de la meditación y, en particular, la visualización de este arcano, te ayudará a corregir tus automatismos y a dominar el arte de vivir de una forma más plena, lúcida y consciente. En efecto, al cultivar este hábito introducirás una cuña en tu proceso de percepción. Esta “cuña de consciencia” interrumpirá la tendencia a la automaticidad y te situará en posición de detectar y corregir tus patrones de conducta.

Pero… volvamos a nuestro ejemplo del café…

La próxima vez que te prepares un café procura evitar las distracciones e intenta hacerlo con plena consciencia. Esto implica, necesariamente, que apagues la televisión o cualquier otro aparato que distraiga tu atención. Además, deberás realizar el proceso con concentración, es decir, “apagando” el ruido mental.

Por ejemplo, si estás en la cocina observa con atención los pasos que das para prepararte el café: cómo llenas un vaso de agua y cargas la cafetera, cómo enciendes el interruptor y el aparato se pone en movimiento, cómo pones a calentar la leche o coges el bote de leche condensada de la nevera, cómo viertes el café en la taza y cómo te dispones a echar la leche en tu café…

Ahora visualiza el arcano… recuerda… el águila blanca representa tu mente que se aquieta, la mujer la escena en la que te desenvuelves, en este caso la cocina, y la estrella tu consciencia…

Si todo ha ido bien habrás sido capaz de discriminar los factores básicos que condicionan tu vida. La mente interpone su actividad y sus hábitos en cualquier actividad que emprendas, la realidad en la que vives activa tus patrones de respuesta… pero ahora la diferencia radica en que estás siendo consciente de ello… y entonces sucede el milagro… haciendo uso del libre albedrío que ahora descubres, sin prisas, tomándote tu tiempo, apóyate en la encimera, mira el jardín a través de la ventana y saborea… saborea este café tan exquisito…

La consciencia, la luz de la consciencia, actúa como la estrella polar que orienta al navegante. Es un faro, un eje de referencia que ilumina tu camino.

Besos y abrazos.

La estrella (cuarta parte).

Perfecto… concentrémonos ahora en los aspectos profundos del arcano.

Como ya hemos comentado el nivel inferior, la base del triángulo, representa el nivel ordinario, la forma habitual de funcionar cuando lo hacemos inconscientemente. La consciencia está “apagada” y lo que predomina son nuestras pautas de respuesta automática. En este nivel todo es, por lo tanto, cíclico y repetitivo.

Con la práctica de la meditación poco a poco se instala en nuestro ser un nuevo paradigma, la actitud meditativa ante la vida. Recuperamos nuestra capacidad de permanecer lúcidos y conscientes ante nuestras circunstancias y, de la misma manera, otros hábitos, más convenientes y evolucionados, sustituyen a los antiguos.

La clave de todo este proceso es el “despertar” de la consciencia. Pero… ¿qué es esto de la consciencia?... Para averiguarlo deberemos retroceder en el tiempo… Retrocede… retrocede en tu memoria… ¿Cuál es el primer recuerdo que tienes de ti? En mi caso mi primer recuerdo es la imagen de mis rodillas apoyadas en el suelo, jugando en el patio de mi casa. Cuando era pequeño solía decir que yo había nacido con cinco años.

Usando el lenguaje coloquial podemos decir que la consciencia es nuestra facultad de “darnos cuenta”, nuestra capacidad de “conocernos” a nosotros mismos. Cuando el homo evolucionó más allá de su condición de primate, elevó su mirada para contemplar las estrellas y algo se iluminó en su interior. La consciencia, nuestra consciencia, es lo que nos permite mirarnos en el espejo del momento presente. Siempre ha estado ahí, a nuestro lado, acompañándonos como el  Grillo de Pinocho, desde que aprendimos a dar nuestros primeros pasos.

Ya hemos visto que el eje que forma nuestro sistema nervioso se comporta como una antena. Pues bien, el despertar en la consciencia amplía su radio de acción conectándonos con una dimensión mucho más profunda. En el Vedanta del hinduismo se definió como el akasha, el éter, y Teilhard de Chardin lo definió como la gnoosfera.

Este éter o gnoosfera es algo parecido a la nube que utilizamos en la actualidad para almacenar y compartir información. No necesita un soporte físico como los servidores de internet pero está ahí, envolviendo nuestro planeta. Piensa… piénsalo un momento… cuando alguien tiene una idea innovadora, ese conocimiento ¿de dónde le viene? Vaya pregunta ¿verdad? Pero mira… Recuerdo la película “El aceite de Lorenzo”, creo que era. Los padres del protagonista, un pequeño con una enfermedad degenerativa del sistema nervioso, estaban absolutamente concentrados buscando una respuesta, una idea que les permitiese salvar la vida a su hijo, pues en esa época la medicina no tenía ningún tratamiento eficaz.

Al final, la clave que necesitan la recibe el padre a través de una vía insospechada: por medio de un sueño. La consciencia de la gravedad de la situación agudizó su estado de concentración y éste abrió un canal de información que le condujo hasta la pista que esperaban.

Ayuda y orientación.

La visualización de este arcano te ayuda a desvincularte del nivel inferior del triángulo, con toda su panoplia de automatismos y repeticiones. Poco a poco, al ir dominando tu capacidad para tomar distancia y mantenerte en el nivel superior, el nivel de la consciencia, tu concentración ganará en profundidad y se ampliará el umbral de la percepción.

¿Te has planteado alguna vez la posibilidad de que hay algo más de lo que vemos a simple vista? Personalmente he tenido esta sensación en multitud de ocasiones. Más de una vez me he visto así, de improviso. Es una especie de dejavus que no se acierta a explicar con palabras. Tú no sabes bien el por qué y el cómo, pero algo dentro de ti te hace presentir o, más bien, sentir que la realidad que contemplas contiene algo más de lo que perciben nuestros sentidos ordinarios.

El incremento del nivel de concentración que proporciona la visualización del arcano amplía los espacios de presencia, la capacidad de mantenerse en el momento presente, por encima del devenir de los fenómenos internos y externos. A diferencia del caso de los padres de Lorenzo, cuya concentración estaba fijada en salvar a su hijo, este tipo de concentración abre un canal bastante más amplio: la guía espiritual.

En este contexto la guía espiritual no se ciñe exclusivamente a lo religioso. Numerosos son los pensadores, tanto religiosos como agnósticos y aún ateos, que teorizan sobre las posibilidades de un multiverso de dimensiones aún desconocidas, pero sí presentidas.

La interconexión en la distancia de partículas que han estado previamente en contacto es bastante explícita a este respecto. El entrelazamiento cuántico se da no sólo entre partículas subatómicas, sino que también sucede en niveles más complejos de la existencia. Cuántas veces habré sentido la proximidad de mis padres o de mis suegros, o de algún amigo muy querido, ya fallecidos, como una presencia viva. A menudo me lo he cuestionado con la mente racional, tratando de averiguar si todo esto no es más que un juego de mi imaginación, tratando de acomodarse a mis deseos. Pero no, no es así y puedo asegurártelo. El corazón no engaña y la evidencia es tan clara que nada puede objetarse.

Como decía, el incremento de la concentración en el momento presente abre el canal de la guía espiritual. En este nivel podrás conectar tanto con tus ancestros como con los seres de santidad que un día caminaron por este planeta. Y lo mismo sucede con todos aquellos que destacaron en nuestra historia, en el arte, en las ciencias, en cualquier campo del conocimiento. Ellos te hablarán a través de tu mente y te proporcionarán ayuda y orientación, usando tu propia voz. Y lo sabrás… tendrás la certeza… de que no estás cayendo en un autoengaño, en una mera ilusión.

Besos y abrazos.