Los
archivos akásicos.
Como
todo es de todos, los habitantes humanos de esta Región tienen
acceso al conocimiento
adquirido por el recién llegado a ella y, asimismo, él accede a la sabiduría
lograda por los demás. Allí el saber es
patrimonio común y se
encuentra
depositado en los llamados Archivos Akásicos, situados precisamente
en el mundo
del Pensamiento. (Aclaro: Este dato lo desconocía: el dónde
están ubicados los Registros Akáshicos, en esos otros planos)
En
esos Archivos el ser encuentra la historia
de sus encarnaciones pasadas.
Puede ver como en una película quien ha sido, con quién ha estado
unido y qué le ha pasado desde su estado prehistórico. Puede
también conocer y comprender la misión de personajes
legendarios.
Así
podemos ver como en el mundo divino reina la unidad, la
evidencia de uno se interioriza
en el cuerpo mental de los demás, aportándoles el conocimiento que
esa evidencia
expresa.
La
pregunta que se plantea entonces es: ¿si todos compartimos el
conocimiento, por qué debemos volver a la Tierra a cosechar más
experiencias? Debido a que la
comprensión
teórica exige pasar por la prueba de la realidad. Es decir,
el conocimiento,
que en el mundo del Pensamiento es un patrimonio común, debe ser aplicado
al mundo material y por ello cada ser debe pasar por un período de experimentación.
(Se me ocurre que el conocimiento sin experiencia, no sirve más que
para acumular datos y más datos, como un ordenador o un robot)
Fijémonos
en los Lamas del Tíbet, ese grupo de monjes budistas, después de
pasar años cultivando su espíritu en los templos y habiendo
alcanzado un alto nivel espiritual,
son obligados a pasar una temporada (por lo general un año) en una
urbe para
poder experimentar sus conocimientos de forma práctica.
(Digo yo que ahí es donde realmente se sabe si ha asimilado las
enseñanzas de años y años, porque en un Monasterio aislado, es
fácil ser bueno y santo).
Cuando
los seres humanos lo hayamos experimentado todo, tendremos una opinión
similar sobre las enseñanzas asimiladas, y cuando nos
enfrentemos con la tarea de crear un universo, lo
haremos sin la necesidad que exista un partido de izquierdas
que diga: "yo lo haría así"; ni uno de derechas
que le lleve la contraria, sino
que sabremos que tal gesto produce tal resultado y lo que es bueno
para uno lo
será
para los demás.
En
los Archivos Akásicos figura nuestra historia. (Aclaro: de cada
uno y de cada una, incluso de plantas, animales, edificios ...) En
la tierra, las gentes sienten mucha
curiosidad por saber lo que han sido en anteriores vidas, pero aquí
ese interés es
secundario, y los que van a consultar la memoria de las vidas, más
que la suya propia
examinan las ajenas, las de personalidades que han marcado de algún
modo la
historia de la humanidad, a fin de comprender cuáles eran los
objetivos de sus Egos
Superiores. Las anécdotas vividas con anterioridad interesan poco,
porque lo que
realmente cuenta son las experiencias conseguidas a través de ellas,
y nada es tan parecido
a una cadena de encarnaciones como otra cadena, puesto que todos
hemos sido
de forma alternativa ricos, pobres, obreros manuales, intelectuales,
hombres, mujeres,
verdugos y víctimas. (Personalmente considero que el tema de los
registros Akáshicos es un tema delicado. No se debe tomar a la
ligera).
El
Ego Superior registra las distintas experiencias y sabe lo que ha
aprendido y lo que le falta. Si en el pasado su vehículo ha vivido
grandes pasiones, amores, amistades o tragedias,
le tiene sin cuidado. Pero la personalidad mortal, cuando vuelva al
mundo de
las anécdotas, sí se interesará y querrá encontrar de nuevo a
aquél que tanto amó y
lo hallará gracias a la ley del karma. (Insisto: no se
debe tomar a la ligera y para hacer consultas ... como diría:
demasiado terrenales).
Tener
conocimiento, a través de una regresión por ejemplo, de
acontecimientos acaecidos
en una vida anterior puede facilitarnos pistas que nos ayuden a
avanzar más
deprisa, a superar traumas. Pero una cosa es lo que tiene que vivir la personalidad
mortal y otra distinta los intereses del Ego Superior. Al director de
una empresa
le importa poco si sus trabajadores acuden al trabajo en bicicleta,
en moto, en
coche o a pie, para él lo relevante es que lleguen a su hora y que
cumplan de forma adecuada
con su cometido.
El
alma permanecerá durante cierto tiempo en las primeras Regiones del
mundo del Pensamiento, viviendo en su Cuerpo Mental. La
duración dependerá de su nivel evolutivo,
cuanto más evolucionada, más corto es el tránsito, porque más
prisa tiene
en volver para seguir cosechando experiencias. ¿Podemos determinar
el tiempo que
va a tardar una persona en realizar su compra semanal en un gran supermercado?
Dependerá de si conoce la colocación de los alimentos, de si ha confeccionado
una lista con lo que necesita y de si se queda mariposeando en alguna sección.
Si conoce las secciones donde debe aprovisionarse y tiene una idea
clara de lo
que desea, irá mucho más deprisa. (Una vez más: una ejemplo
bien clarificador).
Del
mismo modo que en el mundo de Deseos la persona asimiló las
experiencias que le procuraron en la Tierra sus deseos y emociones,
incorporándolas a su alma, en el del
Pensamiento, asimila e incorpora al alma las experiencias
cosechadas gracias a
su actividad mental. Allí los pensamientos tienen una forma exacta y
el que ha cometido
errores mentales encuentra la correcta solución. Solo quienes han
ejercido el
pensamiento en la Tierra tienen vida consciente en esas Regiones.
Pensar, en la Tierra,
ejercer las funciones intelectuales, significa hacer méritos para
ser un ciudadano
consciente en el Segundo Cielo.(Cuestión que deberían tener en
cuenta aquellos y aquellas que acuden a hacer una consulta a los
Registros Akáshicos con demasiada ... le llamaré frivolidad).
El link al canal de youtube, por si prefieres escucharme:
https://www.youtube.com/watch?v=JKUABM1qgpA
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